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sábado, 16 de enero de 2010

Oración Esperanzada ante el terremoto de Haití

Señor:

¿Dónde estabas?
¿Y dónde estás ahora?
¿Dónde te podemos encontrar?
¿Dónde estabas cuando la gente sufría?
¿Dónde estabas cuando sucedió el terremoto?

Son las preguntas que te hago, Señor,
cuando mis pensamientos se ofuscan
al contemplar tanto dolor y tanta tragedia;
tanto edificio derrumbado y tantos muertos por las calles.
Ante el terremoto,
no solo ha temblado la tierra sino también los corazones.
Señor:
No estabas lejos de tantos hermanos nuestros;
estabas en cada persona
y morías cuando moría un hermano nuestro
aplastado por los escombros
o por el vaivén de la tierra movediza.
Y siempre, Señor, sufren las catástrofes los mismos,
y siempre sufren las destrucciones los mismos,
y siempre mueren los mismos.
Miles de heridos,
miles de muertos
y muchísimos más los damnificados.
Y en el horizonte:
Un futuro incierto.
Las escenas son aterradoras:
Dolor y llanto sin consuelo por los muertos,
familias enteras que han desaparecido.
Basta lo dicho para poner en palabra una gran tragedia
y un gran sufrimiento
El terremoto no es, pues,
Señor, sólo una tragedia,
sino que es también una radiografía del país.
Muy mayoritariamente mueren los pobres,
quedan soterrados los pobres,
tienen que salir corriendo
con las cuatro cosas que les quedan los pobres,
duermen a la intemperie los pobres,
se angustian por el futuro los pobres,
encuentran inmensos escollos
para rehacer sus vidas los pobres.
Señor:
La tragedia ha sido grande para los pobres.
Y en medio de la tragedia la vida sigue pujando,
atrayendo y moviendo con fuerza.
Y junto al impulso del propio vivir,
surge también la fuerza de la solidaridad
Es la santidad del sufrimiento.
Puede sonar exagerado,
pero ante estos pobres,
quizás podamos repetir lo que dijo el centurión ante Jesús crucificado:
“Verdaderamente éstos son hijos e hijas de Dios”.
En los pueblos sufrientes, crucificados
Señor:
¿Dónde estabas?
¿Y dónde estás ahora?
¿Dónde te podemos encontrar?
¿Dónde estabas cuando la gente sufría?
¿Dónde estabas cuando sucedió el terremoto?
Las preguntas siguen resonando:
También las hizo Jesús,
y Pablo tuvo la audacia de responder: En la Cruz.
Dios está en entre los escombros de las ciudades rotas,
refugio de damnificados sin nada.
Dios está entre los muertos y destruidos
por la rabia de la tierra que se balancea a su antojo.
Señor:
La mayor esperanza es seguir caminando,
practicando la justicia y amando con ternura.
En este sentido,
ojalá la solidaridad ayude a reconstruir una nueva historia
pero sobre todo personas y pueblos;
ayude a reparar caminos,
pero sobre todo modos de caminar en la vida;
ayude a construir templos, pero sobre todo pueblo de Dios.
Ojalá la solidaridad dé esperanza a este pueblo que sufre y muere
Con ella ya encontrará la gente modos de valerse por sí misma.
Ayúdanos, Señor.
Amén.

Por Antonio DÍAZ TORTAJADA
Sacerdote-Periodista

16 comentarios:

  1. Gracias hermanos desde Francia ,ruego ,rogamos por Haiti.La fuerza de la Oracion ,que es inmensamente poderosa.Un beso y muchas gracias Maria Blanca

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  2. ruegopor todos los que sufren esta horrible tragedias dios le bendigas

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  3. Como dice una antigua película chilena " ya no basta con rezar".

    Los que no somos profesionales de la salud o rescatistas o somos gente común y corriente y no podemos viajar, Hoy mas que nunca debemos aportar, especialmente con dinero que es lo menos perecible, aunque sea mínimo, es cierto que a la gente común como yo no les sobra ni un centavo, pero es amor cuando se comparte no cuando se dan las sobras.
    Si debemos endeudarnos para esta causa, podremos pagar, tenemos la vida que el Señor nos regala, y muchos gozamos de salud, elementos que entre los afectados de Haití no se tienen.

    Ya no basta con rezar hay que hacer un esfuerzo y ser las manos y piernas del Dios que decimos amar.

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  4. Todo lo que sea ayuda siempre será insuficiente, pero todo lo contrario seria si le damos la espalda a este pueblo en ruinas. Un abrazo desde España
    Fabián

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  5. ESPERO QUE MUCHAS PERSONAS SEMBREMOS PENSAMIENTOS DE AMOR HACIA ESTAS PERSONAS Y ESTA ZONA DEL PLANETA TAN DEVASTADA PARA QUE ENCUENTREN DE NUEVO LA ESPERANZA Y LA PAZ.

    29.1.10

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  6. MARGARITA MARIA SOSA GONZALEZ. MISIONERA DE LA MADRE LAURA. COLOMBIA31 de enero de 2010, 12:38

    CADA DIA DIOS SE NOS MANIFIESTA DE FORMA TAN INVISIBLE EN ALGUNOS MOMENTOS..PERO EN OTRAS SITUACIONES, ES TAN EVIDENTE..Y PARA MUCHOS ES OSCURIDAD PERO PARA LOS QUE CONFIAMOS EN SU AMOR Y MISERICORDÌA, SIEMPRE ESTARÀ ENCIENDIDA LA LUZ PARA VOLVER A EMPEZAR..EMPEZAR DESDE LA SONRISA ALEGRE DE LOS QUE SALIERON VIVOS DE ESTE GRAN ACONTECIMIENTO...DESDE LA MANO AMIGA DE TANTOS MEDICOS,ENFERMEROS Y PERSONAS SOLIDARIAS QUE DAN UN PAN Y UN VASO CON AGUA PARA SACIAS UN POCO LA SED Y EL HAMBRE...DESDE EL DESEO DE VOLVER A CONSTRUIR...Y SOBRE TODO DESDE LAS MANOS DE MILES DE HERMANOS QUE ESTAMOS UNIDOS DESDE DIFERENTES PAISES CON NUESTROS HERMANOS DE HAITI...LO MAS GRATIFICANTE ES ABRIR NUESTRO CORAZÒN A LA SOLIDARIDAD Y FORTALEZA DESDE LO QUE SOMOS; UNIDOS A DIOS PARA LEVANTARNOS Y SEGUIR ADELANTE...EL NO NOS ABANDONA NUNCA....

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  7. La oración llena de esperanza, da sentido al amor, pero queda la pregunta ¿ dónde estaban los hombres que gastan ingentes fortunas para armarse o para viajar a la luna o para fiestas,automóviles o transacciones de jugadores de futbol que asustan muentras hay paìses como Haìtí sumidos en la miseria más allá de este terremoto? Dales Señor un corazón abierto para amar

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  8. Que Dios nos ilumine a todos y de alguna forma podamos colaborar, con lo material a través del dinero y con la oración como testimonio espiritual de la presencia del Señor.Nos ayuda a todos.

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  9. Mis Hermanos de Dinamicas Matrimoniales y yo hicimos un acopio para Haiti por una semana y ayer pudimos mandar 112 cajas de ayuda, no es que seamos muy buenos ni especiales pero alguien ya lo dijo aqui, no basta rezar, debemos actuar,tambien alguien lo dijo somos las manos de Dios en este mundo. Actuemos como si de verdad lo fueramos, amemos como si fueramos el que amo hasta el extremo

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  10. Como podría hacer algo por Haiti,Soy enfermero y me iría a ayudar.Todo lo que se haga es poco.Mis oraciones harán su efecto,pero en el lugar,quiza sea más vital.No se como hacerlo ni a quien dirigirme.Dios es grande y su misericordia hará maravillas.¡ojala! Todo esto pase pronto.Desde aqui,pido a Dios que de fuerza y esperanza a todo Haiti.

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  11. quien tenga oidos para oir, que oigan (del libro del amor)

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  12. Anónimo dijo..

    Que nunca falten manos para ayudar a levantarse.
    Que nunca falten abrazos para ayudar a consolar.
    Que nunca falten sonrisas para animar a la esperanza.
    Pero sobre todo que siempre tengamos a Dios en el corazón para no olvidárnos de los menos favorecidos, de los más desdichados, de aquellos a los que el dolor maltrata sin el menor recato.

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  13. Pertnezco a una Comunidad Cristiana del Cinturón sur de Madrid y estamos muy afectados por los trágicos acontecimientos de HAITÍ.

    Somos slidarios y cada miembro de n/comuniad hemos contribuido con ayuda económica a través de Cáritas, Cruz Roja, Intermón, etc., pero además hicimos uns colecta animando a la gente de nuestro barrio que también se solidarizó y contribuyó con 2.000 €.en misa dominical (en la que habitualmente, por ser un bario humilde, no se alcanzan los 500 €)

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  14. hola buen dia yo estoy orando y pidiendole al creador de el cielo y de la tierra proteja a toda la gente en especial alos de haiti en especial alos niños que los proteja en el hueco d su mano y que pronto los diferentes paises podamos adoptar una niño de haiti por que abemos muchas prsonas con buenas intenciones la palabra de Dios dice . YO SOY EL REFUGIO DEL HUERFANO Y LA VIUDA.QUE DIOS LES BENDIGA

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  15. LA ORACION AYUDA MUCHO , SOBRE TODO PARA LOS QUE NOS SENTIMOS IMPOTENTES POR NO CONTAR CON MEDIOS ECONOMICOS SUFICIENTES. LA ORACION RECONFORTA Y RELAJA ANTE TANTO DOLOR Y DESGRACIA. DIOS LOS BENDIGA

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  16. SI HAY ALGUIEN QUE ESTA CON NOSOTROS ES DIOS EL CONFORTA EL ES BUENO

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